Vicent Boix. Tragedia en los campos valencianos
( agricultura - Libros )
Resumen de la tragedia en los campos valencianos y de la crisis de precios en los alimentos
Escritor, autor de /El parque de las hamacas/. http://www.elparquedelashamacas.org/
Justo cuando se estaba redactando este escrito se produjo la triste noticia del fallecimiento de Joan Brusca (secretario de la Unió de Llauradors i Ramaders). Sirva este artículo de homenaje y de recuerdo para este gran defensor del campo valenciano.
Las buenas épocas.
La naranja era fuente de riqueza que determinó la historia, progreso e idiosincrasia del País Valenciano. Fue motor durante aquellos años, no sólo de la economía valenciana, sino también de la española. Vicente Caballer, Catedrático de la Universidad Politécnica de Valencia, afirma al respecto que: “Los españoles tienen una deuda histórica con los valencianos debido a que la producción, comercialización y exportación de naranjas y mandarinas puede ser considerada como la principal actividad económica de España a lo largo de todo el siglo XX si tenemos en cuenta la aportación al PIB, a la Balanza de Pagos y su carácter social…”.[1] Según el mismo autor, las exportaciones de naranja suponían el 20% del total en España en el año 1930 y el 16% en 1962, época en la cual irrumpe el turismo y se moderniza la industria.
En el año 2002, todas las exportaciones del País Valenciano supusieron el 12% del total de la nación.[2]

La hecatombe.
La otrora brillante y espectacular agricultura valenciana no es ni sombra de lo que era. Las condiciones comerciales que sufren los agricultores (productores), son inaceptables en cualquier país desarrollado y democrático. Subrayar que la crisis la sufren los productores, porque el resto de cadena productiva, especialmente los distribuidores, gozan de excelente salud económica. Valgan algunas cifras y datos para entender la dimensión de la tragedia:
[1] CABALLER, V.: “Deuda histórica o Levante feliz?”, en Levante Mercantil, 24 de septiembre de 2006.
[2] http://es.wikipedia.org/wiki/Comunidad_Valenciana
-En muchos casos, el agricultor no vende las naranjas con un precio prefijado al operador (comercio privado o cooperativa. Denominados también comerciantes. Compran las naranjas al agricultor, las confeccionan, las envasan y las venden a un distribuidor, mercado de abastos, centro comercial, supermercado, etc.). Existe un contrato de compra-venta, pero no siempre se usa. El agricultor entrega los cítricos y al final de temporada recibe una cantidad de dinero del operador. Expoliar la renta del agricultor bajo esta modalidad se denomina “Compra a resultas” o “Comercializar”.
-En la campaña 2005-2006 el agricultor percibió el 68% menos respecto a 1997, según la Unió de Llauradors i Ramaders -asociación englobada dentro de la nacional Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG). Para la Federación Provincial de Agricultores y Ganaderos de Castellón (FEPAC) -enmarcada en la Asociación Agraria Jóvenes Agricultores (ASAJA)- los precios de dicha temporada fueron inferiores a los de hace 20 años.[1] El agricultor ha sufrido un aumento en los bienes de consumo que necesita para vivir, sobre todo en la vivienda, mientras el valor de sus cítricos ha bajado vertiginosamente.

-Según el Censo Agrario, el campo valenciano perdió casi el 50% de los titulares de explotaciones entre 1989 y 2003. En 1989 se contabilizaban 286.886, en 1999 bajó a 222.454 y para 2003 la cifra sufrió una merma espectacular situándose en 149.207 titulares (En el País Valenciano existen más de 4 millones y medio de personas). En los últimos años, los titulares de explotaciones jubilados aumentaron del 33,58% al 37,65%. Sólo el 1,7% de los agricultores tiene menos de 30 años.[8] En Castellón (una de las tres provincias del País Valenciano), los agricultores representan el 7% de la población activa.[9]
-De 2000 a 2004 la superficie citrícola disminuyó un 5% gracias en parte al negocio inmobiliario, que desgraciadamente supone la única vía de escape ante la agonía. Evidentemente pocos se benefician, aunque la metamorfosis del territorio ahí está: agricultura por cemento.[10]
[1] GUARDIOLA, D.: “Los cítricos se pagan un 68% menos que hace una década”, en Periódico Mediterráneo, 3 de mayo de 2006.
[2] GUARDIOLA, D.: “La renta agraria ha caído un 14% en el último año”, en Periódico Mediterráneo, 24 abril de 2006.
[3] GUARDIOLA, D.: “Los citricultores piden un mínimo de 0,25 euros/kilo para la nulera”, en Periódico Mediterráneo, 9 de diciembre de 2006.
[4] Institución del gobierno autónomo valenciano.
[5] AGUILAR, E.: “El consumidor paga hasta dos euros por un kilo de nuleras”, en Periódico Mediterráneo, 27 de noviembre de 2006.
[6] Idem 3.
[7] GUARDIOLA, D.: “La necesidad de un precio”, en Periódico Mediterráneo, 7 de diciembre de 2006.
[8] PICÓ M.J.: “Taronges al 4000%”, en Levante, 22 de octubre de 2007.
[9] GUARDIOLA D.: “El 30% de los agricultores ha dejado el campo en 10 años”, en Periódico Mediterráneo, 7 de enero de 2006.
[10] JLZ: “El campo valenciano ha perdido un tercio de sus agricultores en cinco años”, en Levante, 18 de julio de 2006, pag. 36. y GUARDIOLA D.: “El 30% de los agricultores ha dejado el campo en 10 años”, en Periódico Mediterráneo, 7 de enero de 2006.


Fecha de inserción: 25-01-2010 a las 19:10:33